En esta obra, la autora Cristina Herrera, al tener como base las experiencias de los habitantes de la localidad de San Cristóbal al sur de Bogotá y una investigación teórica profunda, apuesta por entender la ciudad como construcción colectiva, como el espacio social desde lo humano, es decir, como un lugar construido y habitado comunitariamente.
El valor que tiene radica en la experiencia directa que le permitió a la autora comprender los éxitos, las tensiones, los olvidos y las pesadumbres de las generaciones de los habitantes de una de las localidades más exóticas de la capital.
El lector se encontrará con una obra que lo hará repensar los espacios locales en los que convive, las comunidades a las que pertenece y la idea de ciudad que tiene.