El cambio ambiental global, en su manifestación más visible, es un problema que está influenciando el desarrollo de los países y de los territorios, tanto por el cambio en si como por las políticas que se plantan para hacerle frente. Las políticas de mitigación del calentamiento global y de adaptación al cambio climático ha sido impulsadas principalmente por el sistema de gobernanza internacional del clima que ha ejercido de facto dominación frente a los ámbitos locales.
Una de las problemáticas centrales que genera esta configuración política es la creación de un nuevo orden global sobre la espacialización de las funciones de cada país frente a los objetivos establecidos por centros de poder y decisión. Esta nueva configuración que viene tomando forma se puede comparar con una división internacional del trabajo en el contexto global.
Una segunda problemática, relacionada con la primera, es que las diferentes realidades territoriales en términos de la diversidad de las geografías políticas, económicas y humanas tienden a ser ocultadas por las dinámicas de la gobernanza internacional del clima.