La mesa de ordenamiento y planeación urbano regional propone una conversación alrededor de los retos y desafíos contemporáneos del territorio en Colombia donde convergen conceptos como urbano, rural, metropolitano, regional y subregional. Tomando como punto de partida las reflexiones y conclusiones que se derivaron durante el 2017 a raíz de la conmemoración de los 20 años de expedición de la Ley 388 de 1997 y del subsecuente marco legal que se ha construido en asuntos territoriales en el país, particularmente la reciente Ley Orgánica de Ordenamiento Territorial (LOOT), proponemos una discusión alrededor de marcos conceptuales, referentes teóricos y herramientas metodológicas que permitan abordar el estado del desarrollo de una política pública urbana en el país.
La planeación y el ordenamiento se encuentran en un momento crucial de cambio dejando a un lado aproximaciones centralizadas tipo “experto” que diseña desde la oficina, a una planeación basada en la participación y que internaliza los procesos de gobernanza para garantizar sostenibilidad. En ese orden de ideas, la Nueva Agenda Urbana junto con la Agenda 2030 (que deriva en los Objetivos de Desarrollo Sostenible) se convierten en referentes importantes para enmarcar los alcances de la planeación y el ordenamiento territorial. En ese sentido, consideramos pertinente los trabajos de investigación interdisciplinarios que tengan una aproximación a través de abstracciones (modelos o simulaciones) que identifiquen incentivos y potenciales resultados de intervenciones, trabajos empíricos (cuantitativos o cualitativos) de identificación, análisis y estudio de los procesos de transformación territorial, y trabajos prospectivos sobre el territorio.
Consideramos que la reflexión debe encaminarse a preguntas centrales de la planeación para el contexto de América Latina, dejando a un lado las visiones euro- y anglocéntricas de la realidad urbana en la región, lo cual lleva a la priorización de fenómenos relevantes y permitentes al caso colombiano como son la inclusión, calidad de vida, segregación, desarrollo local, e innovación, que se evidencian en el territorio, producto de la implementación de los instrumentos de planificación. Asimismo, consideramos que se le debe prestar elevada atención a los retos que se derivan de los acuerdos de paz y la reorganización territorial que esto conlleva para el caso Colombiano.